Por: Ana Luisa Brocada / clúster Álamos
El pasado 16 de enero a las 6 de la tarde, el Espacio Cultural Haras se llenó de arte y emoción con la celebración de un Café Literario con Poesía y Música, organizado por la Dra. Griselda Lobato como parte del círculo de lectura. Este evento, pensado para enriquecer el amor por la literatura en sus múltiples expresiones, tuvo como invitados especiales al pianista Salvador Govea y al destacado poeta Paco Rubín y con la asistencia de un gran número de colonos de Haras.
Un espacio para la palabra y la música
El propósito del círculo de lectura, y en especial de esta actividad, es ampliar el espectro literario de los asistentes, quienes no solo disfrutan de la novela, sino también de poesía, cuento y ficción. La actividad comenzó con una lectura colectiva en voz alta de diversos poemas, un momento íntimo que permitió a cada participante conectar con las palabras de grandes autores.
A estas actividades se sumó la intervención del poeta Paco Rubín, acompañado por la interpretación musical de Salvador Govea, transformando el evento del 16 de enero en un diálogo entre versos y melodías que cautivó a los presentes. Rubín, reconocido por su ludolingüística y su enfoque en la poesía escénica, ofreció una experiencia única que entrelazó su creatividad literaria con la emotividad del piano.
Una propuesta que evoluciona
A partir de este año, este tipo de encuentros se realizarán dos veces al mes. Uno de ellos contará con la participación de un poeta y un músico que lo acompañe, como fue el caso de Poesía la Piano como fue nombrado. El otro será un espacio dedicado exclusivamente a la lectura y la interacción de los asistentes, fomentando un diálogo abierto y enriquecedor.
Paco Rubín: un poeta sin fronteras
El evento marcó la tercera participación de Paco Rubín, catedrático de la Escuela de Artes de la BUAP. Publicista, poeta y escritor de nacionalidades mexicana y española, Rubín ha llevado su voz poética a escenarios de México, Argentina, Cuba, Colombia y España. Sus palabras han encontrado hogar en formatos tan diversos como libros, barajas y hasta cajas de medicina, mostrando su pasión por el juego lingüístico y la experimentación lírica.
Rubín no solo es un maestro de las palabras, sino también un narrador visual. Su estilo, caracterizado por su sombrero y su singular diccionario mental, transforma cada presentación en una experiencia vibrante. En esta ocasión, su colaboración con Salvador Govea añadió una dimensión sonora que elevó aún más la conexión entre el público y su poesía.
Un futuro prometedor para el Café Literario
Con esta edición, el Café Literario rearma su compromiso de fomentar la lectura y la apreciación del arte en sus múltiples manifestaciones. Este espacio promete convertirse en un punto de encuentro para quienes buscan inspiración, diálogo y comunidad, un lugar donde la poesía y la música seguirán siendo protagonistas. El próximo evento se vislumbra con igual entusiasmo, dando continuidad a una tradición que celebra el poder transformador de las palabras y las notas musicales.
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